¿Cuántas veces te has sentido bloqueado ante la situación de tomar decisiones complejas?
Saber lo que tienes que hacer, pero no dar el paso.
No es que no sepas qué hacer… es que te da miedo hacerlo.
“Hay decisiones que duelen… pero quedarse quieto duele aún más.
Lo sé porque lo viví. Porque a veces el miedo no es al cambio, es a dejar de ser quien crees que debes ser.”
Sabemos que aproximadamente un 80 % de las decisiones que tomamos tienen un fundamento emocional. La investigación psicológica confirma además que las emociones específicas —como la ira, la tristeza o el miedo— tienen un efecto medio a grande en nuestros juicios y decisiones, según un meta-análisis publicado en Cognition & Emotion. Aprender a discernir y racionalizar estas situaciones es clave para evitar trampas mentales y decisiones precipitadas.
Este artículo es para ti si estás en ese punto. Y no te daré respuestas prefabricadas, sino preguntas poderosas que te devuelvan a tu verdad.
🧠 ¿Por qué nos cuesta tanto decidir?
- Porque el cerebro odia la incertidumbre. Preferimos lo conocido (aunque duela) antes que lo incierto (aunque libere).
- Porque confundimos tomar decisiones con controlar el resultado.
- Porque hemos aprendido que equivocarse es fracasar, no aprender.
Pero lo más peligroso no es tomar una mala decisión.
La no-acción también es una elección… y suele tener un precio más alto del que imaginamos.
Es quedarse bloqueado en la indecisión. Pero aún no está todo perdido: avanzar es posible si sabes cómo.
🎯 Decidir desde el «para qué», no desde la emoción para tomar decisiones complejas.
Tomar decisiones valientes no es lanzarse sin pensar.
Es saber distinguir si estás actuando desde:
Desde el miedo… | Desde un mindset de crecimiento… |
---|---|
“¿Y si sale mal?” | “¿Y si sale bien?” |
“¿Qué pensarán los demás?” | “¿Qué quiero realmente para mí?” |
“No estoy preparad@” | “Voy a aprender en el proceso” |
El cuerpo sabe antes que la mente.
Por eso muchas decisiones valientes no se razonan… se sienten.
🛠 Herramientas para decidir con confianza
✅ 1. Técnica 5–5–1
Pregúntate:
¿Cómo me quiero sentir con esta decisión en 5 días?
¿Y en 5 meses?
¿Y en 1 año?
Te ayuda a salir del bucle mental y poner perspectiva.
✅ 2. Check-in corporal
¿Qué dice tu cuerpo?
¿Se contrae o se expande cuando imaginas esa situación resuelta?
Tu cuerpo tiene un radar más honesto que tu cabeza.
✅ 3. Decisiones alineadas con tus valores
Haz una lista rápida de tus 3 valores no negociables.
Luego pregúntate:
¿Esta decisión está alineada con esos valores… o los traiciona?
Conclusiones para avanzar:
Las decisiones valientes no son las que parecen heroicas desde fuera, sino las que te hacen sentir fuerte por dentro.
A veces no necesitas más tiempo para decidir.
Necesitas parar a escucharte de verdad.
La parábola del leñador: no tala más arboles el que más duro trabaja, sino quien dedica 20 minutos cada mañana a afilar su hacha.